La ansiedad no es lo que eres, es solo un patrón

Si estás constantemente atrapado en un bucle de preocupación, pensamientos excesivos o tensión, no estás roto. Simplemente estás siguiendo un patrón que tu mente ha aprendido a repetir.

Y esto es lo más importante que puedes escuchar hoy: Tú no eres tu ansiedad.

La ansiedad es real. Pero no es un rasgo de la personalidad. No es algo con lo que estés destinado a vivir para siempre. Es un bucle que tu subconsciente ha memorizado y, como cualquier bucle, puede interrumpirse y reescribirse.

La verdad sobre la ansiedad que la mayoría de la gente nunca escucha

La ansiedad suele etiquetarse como un trastorno. Y en casos extremos, lo es. Pero para millones de personas, la ansiedad es el efecto secundario de algo mucho más profundo: una mente subconsciente que cree que el mundo no es seguro, que no se está preparado o que algo malo podría suceder.

Es un mecanismo de protección que se ha estancado en exceso.

Pero a diferencia de la medicación, que solo calma la superficie, la hipnosis habla directamente a la raíz del problema: ese sistema de alarma interno.

Por qué la hipnosis funciona tan poderosamente contra la ansiedad

En estado de hipnosis, accedes a la misma parte del cerebro responsable del miedo, el estrés y la conducta reactiva. Pero en lugar de reforzar viejos patrones de pánico, le das a tu mente un nuevo guion:

• “Estoy a salvo.”

• “Estoy anclado.”

• “Puedo respirar con esto.”

Con cada sesión, esas afirmaciones dejan de parecer afirmaciones y comienzan a sentirse como verdad.

La calma siempre estuvo ahí

¿Y si te dijera que, en lo profundo de tu ansiedad, hay una parte tranquila en ti que siempre ha existido?

La hipnosis no te calma. Te recuerda quién eras antes de que el miedo te dominara. Y una vez que tu mente recuerda la seguridad, deja de dar la alarma.

No luchas contra la ansiedad. La desaprendes.